Arboles sureños sostienen un extraño fruto
Sangre en las hojas y sangre en la raiz
Negras nalgas que se balancean bajo la brisa sureña
Extraño fruto que cuelga de los alamos.
Escena pastoral del noble sur
Ojos desorbitados y boca desencajada
Dulce y fresco aroma de magnolia
Y luego el repentino olor a carne abrasandose.
Aqui hay un fruto para que lo arranquen los cuervos
Para que la lluvia lo empape, para que el viento lo aspire
Para que lo pudra el sol, para que el arbol lo suelte
Aqui hay una extraña y amarga cosecha.
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